Internet, los servicios que usamos todos los días como el correo electrónico, las búsquedas… se procesan y distribuyen gracias a enormes centros de datos que consumen ingentes cantidades de energía eléctrica. Parte de esa electricidad se destina a la indispensable refrigeración de los equipos electrónicos.
En Suecia han encontrado una manera de ser más sostenible y, al mismo tiempo, disminuir el gasto eléctrico para refrigeración. Han iniciado la iniciativa Stockholm Data Parks, que permitirá a los data centers de Estocolmo vender el calor generado a la compañía Fortum Värme, que estaba buscando alternativas a los combustibles fósiles. Vía Inhabitat.