No hay nada más efectivo para crear una asociación positiva inconsciente hacia una marca que conseguir que el usuario del producto sonría. Junto con la sonrisa viene el aumento de la valoración subjetiva de los productos de la marca, que es lo que en última instancia se persigue.
La foto que acompaña a este post muestra un ejemplo, un “mensaje sorpresa” en uno de los productos de una conocida marca de comida rápida.