Quizás el principio básico más importante de la metodología Lean aplicada al desarrollo de negocio sea “Falla deprisa”. Dicho de otro modo, te interesa saber si una idea no funciona lo antes posible y lo más barato posible.
Desde ese punto de vista, es prácticamente imposible que las organizaciones tradicionales sean ágiles, debido, sobre todo, a la manera en que se toman decisiones. En lugar de usar datos objetivos (ideas que se prueban, demostrando si valen o no), la decisión de qué producto desarrollar se toma por la opinión “experta” de los puestos más altos de la jerarquía (empresas top-down) o por la pericia de ciertos jefes de proyecto para vender sus ideas a gerencia (empresas down-top).
En este artículo, Itamar Gilad, antiguo Product Manager de Google, describe cómo GIST Planning es una metodología mucho más capaz de generar una organización ágil que los enfoques tradicionales top-down o down-top.